A CHINAMADA VOY
DESPACITO, CAMINANDO.
Domingo, 9 de marzo de 2014.
Pedro y yo tenemos
el propósito de ir caminando a Chinamada desde la Cruz del Carmen y regresar
al punto de partida.
Es una ruta casi autoguiada, habiendo en todo momento
carteles indicativos que hacen muy difícil la pérdida del sendero. El camino
está arreglado y es muy ancho.
El modo de llegar a la Cruz del
Carmen la expuse en la entrada anterior, pero como vamos a retornar al mismo lugar, decidimos
llevar el coche.
Con mucha ilusión comenzamos la marcha, por la parte derecha del
restaurante, donde empieza el sendero.
A los pocos minutos de emprender la marcha, nos dimos cuenta que tendríamos
que ir más despacio de lo habitual, debido a que el suelo resbalaba por la
lluvia de la noche anterior.
Llegamos a una pista de tierra, la cruzamos y seguimos de frente,
bajando por el sendero.
Con cuidado de no resbalar, descendimos hasta el fondo del barranco donde
corre un chorro de agua. Subimos a la
izquierda, por el mismo sendero.
El sendero termina en una pista agrícola, donde hay varias casas.
Debemos ir a la izquierda de esa pista. Volviéndose otra vez a sendero.
Termina en la carretera general asfaltada, seguimos caminado a la
izquierda y por la izquierda de la carretera que baja ligeramente.
Por esa zona podemos apreciar el mar en la zona de la Punta del Hidalgo y Los Batanes.
Seguimos bajando por la carretera hasta encontrar una escalera de
piedra, muy bien hecha, con un cartel indicativo: Chinamada, Carbonera. Bajamos por ella.
El roque tan espectacular, que ya no nos va a abandonar en nuestro
recorrido, es el Roque de Taborno.
Llegamos a un cruce de caminos, donde hay dos opciones:
- Seguir a la izquierda y llegar directamente a Chinamada.
- Seguir a la derecha y llegar a las Carboneras y de ahí a Chinamada
Nosotros decidimos la 2ª opción, porque bajar a las Carboneras es más
fácil que después subir, y pretendemos hacer una pequeña circular.
Espectaculares vistas de las Carboneras y Taborno vigiladas por su
imponente Roque.
La vegetación es exuberante, estoy admirada.
¿Sabéis con que planta me tropecé? CON UNA CHAHORRA, es parecida a nuestra tajora gomera.
Bajamos una escalera y llegamos a la carretera asfaltada de las
Carboneras, seguimos a la izquierda. El
pueblo que está enfrente es Taborno y su Roque.
Pasamos por la ermita, cuyo patrón es San Isidro Labrador.
Seguimos carretera adelante, hacia Chinamada.
Al poco rato nos encontramos una escalera de cemento muy empinada y
recién arreglada.
Podíamos seguir ese sendero o continuar por la carretera. Como teníamos
mucho ánimo subimos por el sendero. NO
OS LO RECOMIENDO porque al terminar la subida todo se tornó INTRANSITABLE, es
mejor seguir por la carretera, o bien preguntar a los lugareños si ese sendero
ya está recuperado o no.
Ese sendero vuelve a dar a la carretera, no olvidar que Chinamada está a
la izquierda.
¡Por fin! Al llegar es imposible no ver la ermita, dedicada a San Ramón
Nonato, y la plaza.
Es un buen lugar para comer y descansar, así como hacerle unas fotos a
las cuevas viviendas que son típicas del lugar. También hay un restaurante,
mitad cueva y mitad exterior.
De las Carboneras a Chinamada
hay una romería, en el verano, muy popular.
Regresamos por la ruta 1ª, citada
anteriormente. Pasamos por una casa deshabitada que tenía un corral de ovejas con gallinas.
Por este sendero se aprecia muy bien unos caseríos llamados Los Batanes.
Cuando llegamos al coche, en la Cruz del
Carmen, habíamos recorrido 12 kilómetros aproximadamente.
ATENCIÓN:
POR CAMINOS RESBALADIZOS, MEJOR DESPACIO.
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