lunes, 10 de enero de 2022

DE LOS CHORROS DE EPINA A TAZO.

 

DE LOS CHORROS DE EPINA A TAZO.

La Gomera – Islas Canarias.

Lunes, 13 de diciembre de 2021.

Hoy, aprovechando que es día de Santa Lucía, decidimos hacer una ruta que terminara en Tazo, donde está la Ermita, y quedarnos a la misa.

Comenzando la ruta.

Comenzamos en la entrada de Los Chorros de Epina, por una pista enlosada que llega a la Ermita de San Isidro Labrador, construida en la segunda mitad del siglo XX.

Ermita de San Isidro Labrador con El Lomo del Carretón detrás.

La ubicación de la ermita es inmejorable, rodeada de un bello monte de fayal-brezal es el límite con el Parque Nacional de Garajonay. El verdor que nos rodea y el murmullo del agua hacen que nos transportemos a la época en que un humilde labrador medianero se hace merecedor de la santidad gracias a su gran fe. Su fiesta se celebra el domingo más próximo al 15 de mayo.

Ahora vamos a comenzar un tramo del sendero GR-132 “Circular de La Gomera” bajando por la escalinata de piedra que nos lleva a “Los Chorros de Epina”. Existe una leyenda sobre los mismos y es que para encontrar el amor verdadero las mujeres deben beber de los chorros pares y los hombres de los impares, si las mujeres lo hacen al revés se convierten en brujas.

Los Chorros de Epina.

La gente rica de Vallehermoso mandaba a las criadas a llevarle agua de estos chorros, por su gran pureza, y, para no ser engañada, les pedían un gajo del viejo aderno (Heberdenia excelsa) que estaba cerca de aquí, ya desaparecido.

Tras la sequía del verano, hay poca agua en los chorros… espero que este invierno les proporcione el esplendor de otros años.

Volvemos sobre nuestros pasos un par de metros y tomamos el sendero que continúa recto, NO subir por la escalera que nos llevaría a la ermita.

A los pocos metros nos encontramos un cruce de caminos con flechas indicativas, debemos continuar por el sendero que baja y que está señalizado como “Epina- Ermita de Santa Clara”

¡Cuidado al atravesar la carretera CV-16 que va a Alojera!

Si al bajar miras hacia detrás por la derecha observarás una formación geológica muy llamativa, se trata del Lomo del Carretón, declarado Monumento Natural en 1994.  Se compone de coladas basálticas que forman un acantilado de gran interés geológico y botánico, pues en este lugar se encuentran especies endémicas como es la tabaiba amarilla de La Gomera o tabaiba de Epina (Euphorbia Lambii).

Caserío de Epina.

El sendero nos va introduciendo en la cabecera del valle formado por el Barranco de Epina que pasará por Cubaba. En esta vaguada es donde se encuentra el caserío de Epina, formado por unas decenas de casas, algunas rehabilitadas y otras tal y como eran hace más de 200 años, de piedra, tejado a dos aguas y teja árabe, conocida como teja del país.

Marcando tres épocas diferentes.

En la actualidad el caserío está casi deshabitado, no obstante, podemos observar terrenos cultivados de papas, millo o parras, que junto a la ganadería fue y sigue siendo la actividad principal de sus habitantes.

Horno de pan.

Si quieres puedes desviarte del camino para apreciar mejor las construcciones, pero no olvides volver al sendero indicado con las marcas de GR-132, que pasa bordeando el caserío hasta salir de él.

Saliendo de Epina.

Un detalle del camino.

Nos encontramos ahora un paisaje diferente… caminamos entre un sabinar (Juniperus turbinata ssp. canariensis) característico del paisaje de Vallehermoso, municipio en el que se encuentra toda nuestra ruta, y un palmeral (Phoenix canariensis), tal vez, lo más llamativo para el que viene por primera vez por la cantidad de palmeras, unas 12.220 de las 116.330 que tiene La Gomera.

Palmeral y sabinar.

Aunque hablar del aprovechamiento de la palmera nos llevaría un capítulo entero, debo decir que, en La Gomera, es en Tazo, Cubaba y Alojera donde se extrae la mayor cantidad de guarapo (savia de la palmera) para luego elaborar la miel de palma, o bien artesanalmente para el consumo familiar o bien de forma industrial para su comercio.

Continuamos caminando.

Y llagamos a Teheta, que es donde se encuentra un horno de tejas y una era, pero ésta última tan llena de vegetación que me fue imposible distinguirla.

Sabinar y la montaña de Teselinde al fondo.

Horno de tejas en Teheta.

Aquí, hay un cruce de caminos bien señalizado. Si sigues de frente por una pequeña pista vas a dar a la carretera que baja de la CV-16 y va a Tazo y a Arguamul, pudiendo continuar el GR-132, pero esa no es nuestra ruta, así que… ¡No sigas de frente!

Debemos tomar el sendero de la izquierda que nos va a llevar al caserío de Tazo, llamado antiguamente Taso.

Bajando a Tazo.

Aunque para mucha gente Tazo es la zona comprendida entre Arguamul y Alojera, para los lugareños sería sólo la comprendida alrededor de la Ermita de Santa Lucía, aparte está Cubaba y La Costa.

Todavía se puede apreciar los paredones de huertas abandonadas, testigo de la actividad agrícola de la zona, tanto de subsistencia como para la exportación, en este caso fueron tomates. En la actualidad las pocas familias que residen se dedican a la ganadería y la explotación de la palmera, el queso y la miel son dos productos dignos de alabanza.

Tazo cuenta con 40 edificaciones diseminadas, algunas son segunda residencia o alojamiento turístico y las menos, 8 o 10, residencia fija.

Bueno…continúo con mi ruta…en la bajada hay que tener cuidado de no resbalar porque el suelo es arenoso.

Llegamos a un tanque de agua potable y continuamos el sendero hasta llegar a una pista de tierra que nos indica la dirección a Cubaba a la izquierda, pues nosotros debemos ir a la derecha y continuar hasta llegar al segundo cruce a la derecha y subir a la ermita.

Tanto a la derecha como a la izquierda se llega a la Ermita.

Sin embargo, hicimos otro recorrido pues pensamos que esa pista daba a una casa y bajamos por un sendero que nos llevó a la vivienda vacacional “El Pirguan” y desde ahí, siguiendo las señales, llegamos a la Ermita de Santa Lucía, detrás de la cual hay un gran tabaibal de tabaibas dulce (Euphorbia balsamifera).

Misa en la Ermita de Santa Lucía.

La tradición cuenta que un barco anclado en la Playa del Trigo no podía zarpar hasta que dejaron en las aguas a la Santa que llevaban, entonces un grupo de hombres de Tazo la llevaron a La Costa e hicieron una capilla, de la cual todavía se conservan algunas piedras de la base.

Hay escritos que mencionan a una ermita de la Santa de la palma en La Gomera en 1424 construida por los portugueses. Eso coincide con que en esa zona vivían portugueses en esa época y que tenían horno de ladrillos y tejas, o sea, que podrían haberla construido.

Si es así, entonces no cabe duda que fue la primera iglesia gomera y que aquí empezó la cristianización de la Isla.

Esta primera Ermita estaba en un lugar retirado y cuando crecían los dos barrancos quedaba totalmente aislada, por lo que decidieron hacer otra Ermita… la actual, pero se desconoce la fecha del traslado, si bien se sabe que fue una de las primeras de La Gomera.

Ermita de Santa Lucía.

Santa Lucía, nacida en Sicilia, fue una joven rica que convenció a su madre para repartir su riqueza entre los pobres, cuyo acto despertó la envidia del Procurador y la mandó a matar. La palma se refiere al martirio y los ojos en la bandeja son los ojos de los que le piden la luz para ver, y yo creo que, también, podría significar la luz para ver el camino a seguir, sea físico o espiritual.

Imagen de Santa Lucía.
Hoy no hubo fiesta ni procesión por el tema de la covid-19, pero si hubo misa, con chácaras y tambores. Después cada uno se fue con su picnic a los alrededores como años atrás y me pareció que estábamos en una gran fiesta.

Chácaras y tambores junto a la Ermita de Santa Lucía.

Recomiendo este paseo de 5 kilómetros aproximadamente, y si no tienes coche puedes regresar por la carretera, que sería un poco menos de 10 kilómetros en total.

CONSEJO: Lo importante en las caminatas es el entusiasmo que tengas y lo feliz que seas.

Lleva comida porque no hay donde comprar.

BIBLIOGRAFÍA:

Sobre las ermitas:

El libro titulado “Vallehermoso. Sus ermitas. (Religiosidad popular)”, escrito por Blanca Reyes Fernández Fernández (Carmelita Misionera). Editado por el Excmo. Cabildo de La Gomera. Litografía Romero. 1999.

Sobre El Monumento Natural del Lomo del Carretón:

https://biosfera.lagomera.es/monumento-natural-lomo-del-carreton/

Sobre la tabaiba de Epina (Euphorbia Lambii)

http://www.floradecanarias.com/euphorbia_lambii.html

Sobre el caserío de Epina:

http://www.vallehermoso.info/informacion-general/caserios-y-barrios/epina/

Sobre la fabricación de tejas en Canarias:

https://www3.gobiernodecanarias.org/medusa/wiki/index.php?title=Tejer%C3%ADa_tradicional

Sobre el censo de palmeras en Canarias:

https://www.europapress.es/islas-canarias/noticia-medio-ambiente-crea-mapa-palmeras-canarias-casi-556000-ejemplares-20180123134658.html

Sobre el caserío de Tazo:

https://www.gomeranoticias.com/2020/03/30/taso-y-su-palmeral-breve-relato-del-funcionamiento-de-un-agrosistema-tipico-de-la-gomera/

 

http://www.vallehermoso.info/informacion-general/caserios-y-barrios/tazo/

domingo, 5 de diciembre de 2021

RESERVA NATURAL INTEGRAL DE BENCHIJIGUA.

 

RESERVA NATURAL INTEGRAL DE BENCHIJIGUA.

La Gomera – Islas Canarias.

Domingo, 30 de noviembre de 2021.

Hoy vamos a caminar, un tramo, por La Reserva Natural Integral de Benchijigua, perteneciente, en su totalidad, al municipio de San Sebastián, la cual abarca la cabecera del barranco del mismo nombre hasta el canal de agua que recorre su cuenca y las escarpadas laderas laterales, que limitan con El Parque Nacional de Garajonay, el Paisaje Protegido de Orone y se solapa con El Monumento Natural de Los Roques, llegando, por la derecha, hasta Las vueltas de Juacluye, cerca de Las Toscas.

Ahora se denomina Reserva Natural Integral de Benchijigua.

Fue nombrada como tal en 1994, aunque desde 1987 ya era un espacio protegido, debido a su alto valor paisajístico y geológico, el gran número de endemismos y especies amenazadas.

Es bastante interesante leer el Plan Director de La Reserva, para ver las prohibiciones y saber qué no debemos hacer en un espacio protegido. Dejo enlace en la Bibliografía.

El sendero de nuestra ruta comienza justo al lado izquierdo del monumento a las 20 personas que perdieron la vida en el incendio de 1984, en la carretera general GM-2 frente a un pequeño estacionamiento.

Esta zona es muy sensible a los incendios debido a que está rodeada de vegetación degradada que es altamente combustible, unido a la orografía que dificulta su extinción, por ello no se libró del gran incendio del año 2012, donde afortunadamente no hubo que lamentar víctimas humanas.

Si quieres saber más detalles te recomiendo leer el principio de la entrada en este blog titulada “Del Roque de Agando a Chejelipes” del 20 de marzo de 2018.

El día de hoy está lluvioso y nublado, por lo que no pude obtener ninguna foto del Roque de Agando, cosa que no me preocupa porque ya tengo archivadas unas cuantas.

La lluvia no impidió que realizara una de las rutas más gratificantes que he hecho en mucho tiempo. Así que muy despacio para no resbalar empezamos el descenso, en principio bastante pendiente, suavizándose a medida que bajamos.

El sendero trascurre entre un pinar de pino canario, con pocos ejemplares, donde se ve el efecto del fuego y una vegetación de fayal brezal donde abunda los tagasastes y codesos. Además, te encuentras con el tajinaste azul, la salvia de monte, las beas, siemprevivas y brotando las margaritas, entre otras plantas.

Nuestro guardián, El Roque de Agando, escondido tras la niebla, nos muestra planos insólitos de sí mismo, lo cual nos fascinó, invitándonos a hacer fotos que en realidad no captaban la belleza y la magia del momento.

Roque de Agando.

Y llegamos al canal, fin del La Reserva Natural Integral de Banchijigua, por esta zona.

Camino y canal.

Te preguntarás quién hizo este canal y con qué fines. Voy a hacer un pequeño resumen:

A principios del siglo XX, el tinerfeño Álvaro Rodríguez López y el grupo noruego encabezado por la familia Olsen compraron tierras al sur de Playa Santiago, convirtiéndose en los mayores terratenientes de la Isla, pero esto conlleva buscar agua para tales extensiones, por eso en 1912 solicitan autorización para derivar las aguas públicas que corrían por el barranco de Santiago hacia la finca de Tecina, lo cual fue aprobado.

Lo primero que hicieron fue adquirir la finca de Benchijigua donde nacían las aguas y acto seguido ejecutar las obras necesarias, entre otras este canal, para llevar a cabo su objetivo.

Tras este pequeño repaso de la Historia seguimos nuestra caminata por el valle que va cambiando de vegetación, apreciándose ahora la mano del hombre en la presencia de palmeras, almendros, viñas, piteras y tuneras.

El sendero es arenoso por lo que facilita la marcha, ahora que está lloviendo y las vistas, con el contraste que proporciona la niebla, son preciosas. ¡Lástima no ser fotógrafa!

Lluvia y niebla.

Seguimos avanzando y aparecen las primeras casas de Benchijigua, cuatro de las cuales fueron rehabilitadas para turismo rural, pero que en la actualidad no tienen uso.

Casa rehabilitadas de Benchijigua.

Lo primero que se encuentra es la atarjea del “jerío” de un molino de agua, se trata del molino de Arriba que junto al molino de Abajo son los dos únicos molinos conocidos, si bien hay datos históricos de que hubo uno en 1571 desaparecido totalmente.

Canal del jerío del molino de Arriba.

De los dos molinos el primero en abandonarse fue el molino de Arriba, en la década de los 70, mientras que el molino de Abajo, que también sufrió la misma suerte durante muchos años, fue restaurado por un vecino de Benchijigua conocido como Perico, previa autorización de Don Álvaro, y estuvo moliendo en él hasta principio de la década de los 90.

Casa de Banchijigua.

Llegamos al caserío, que es bastante disperso, llamando la atención una edificación rectangular, la antigua escuela, en cuya puerta lateral tiene el letrero “Benchijigua”. Junto al camino hay un horno de pan cerca de un eucalipto y un pino, que nos sirvió para cobijarnos de la lluvia.

Antigua escuela y cruce con el camino a Imada.

Hasta aquí llega la pista de tierra CV-10 que viene de Las Toscas y de aquí parte otra hacia una casa aislada en la zona Los Castaños, dijéramos que lo más transitado finaliza en la ermita de San Juan frente a nosotros. Una particularidad de esta pista es que de ella parte la pista asfaltada del barrio de Lo del Gato y el motivo de no asfaltarla en su totalidad es por tratarse de una construcción privada y que pasa por La Reserva.

Ermita de San Juan.

Nos fijamos ahora en la Ermita de San Juan, que alberga a sus patronos San Juan Bautista y Santa Isabel, cuya festividad es el sábado más próximo al día 24 de junio, fiesta entrañable y familiar, donde los antiguos moradores del lugar se reencuentran y conviven como antaño.

En la nueva remodelación de la plaza desentonan los tubos para los toldos, a mí me gusta más sin ellos.

Detrás de la ermita existen unas cuevas que probablemente tuvieron uso pastoril y delante una gran era rectangular, testigo de las labores agrarias de la zona.

Cuevas, tal vez, de uso pastoril.

Era rectangular.

Regresamos sobre nuestros pasos y a la izquierda, entre los eucaliptos, se puede observar restos de un horno, que no sé cuál sería su uso si de pan o de tejas.

Clavado en el tronco de un pino está la señal que indica la dirección para ir a Imada y a la presa de Benchijigua, esa es una ruta para otra ocasión.

Seguimos adelante por la carretera y a los pocos metros a la derecha baja un sendero debidamente señalizado, el cual debemos tomar. Pasamos la cañada y en una piedra hay una señal que nos indica por dónde debemos seguir. El camino pasa frente a una de las cuatro casas restauradas y cruza otra cañada.

Entrada del sendero.

Caminando junto a las casas rehabilitadas.

Llegamos a la pista asfaltada que va al barrio de Lo del Gato y giramos a la izquierda subiendo hasta la curva donde sigue el sendero marcado por dos muritos de piedra.

Carretera de Lo del Gato y, enfrente, espejos de falla.

Es hora de pararse a observar las formaciones geológicas del terreno: En primer lugar, pasamos junto al gran pitón traqui-fonolítico Roque de Agando, al fondo y a la derecha está la montaña de Yerta aunque ahora no la podamos ver por la niebla, la Ermita está junto a un promontorio basáltico que es parte del dique circular de Benchijigua, un singular elemento geológico con forma de anillo ovalado, cortado unos metros por el riachuelo y por la parte sur del mismo, cerca de Lo del Gato. Las lajas de la taparucha que tenemos enfrente brillan con la lluvia como auténticos espejos, por algo las llaman espejos de falla.

Parte del dique circular de Benchijigua.

Seguimos la ruta y llegamos enfrente del barrio de Lo del Gato y al cruce con el camino que viene de dicho caserío, así que puede ser una variante el pasar por ahí.

Barrio de Lo del Gato.

Seguimos bajando por el lado izquierdo del barranco todo el rato, pasando por un tramo algo comprometido para personas con vértigo, porque, aunque es ancho, no tiene barandilla.

Camino sin barandilla.

Y llegamos al fondo del barranco, aquí no hay sendero, pero es fácil continuar porque nos dirigimos al molino que está a la derecha y luego volvemos de nuevo a la izquierda, al camino bien visible que asciende a Pastrana, pero antes debo mencionar que este molino, conocido como molino de los Vera, fue el último que estuvo moliendo de toda la Isla, concretamente hasta 1998.

Fondo del barranco.

Molino de los Vera.

En Pastrana ya hay carretera asfaltada hasta Playa Santiago, por lo que nos pareció conveniente terminar la caminata y bajar en coche.

Llegando a Pastrana.

Ermita de Pastrana.

La ruta fue corta, de unos 6,8 kilómetros aproximadamente, pero enriquecedora, gratificante y espectacular. La volvería a repetir en primavera.

CONSEJO: No tengas prisa…disfruta y ve con ilusión.

BIBLIOGRAFÍA:

Plan Director de la Reserva Natural Integral de Benchijigua:

http://www.idecanarias.es/resources/PLA_ENP_URB/LG/AD/G-01_Benchijigua/1015/TNP/pd_rni_benc_nu.pdf

 Canal de agua en Benchijigua, página 156:

http://repositori.uji.es/xmlui/bitstream/handle/10234/173198/2017%2c_74%2c_135-166.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Guía geológica, página 184:

http://www.igme.es/LibrosE/GuiasGeo/garajonay_sp/184/

Sobre los molinos de agua:

“MOLINOS DE AGUA EN LA GOMERA” por Francisco Aguilar Ferraz, editado por El Excmo. Cabildo Insular de La Gomera, en 2003

Páginas 254 y 258.

 Sobre las fiestas en Benchijigua:

https://www.gomeratoday.com/2014/06/20/benchijigua-celebra-sus-fiestas-en-honor-a-santa-isabel-y-san-juan/

 

miércoles, 13 de octubre de 2021

DOS CIRCULARES: LAS CRECES Y CAÑADA DE JORGE.

 

DOS CIRCULARES: LAS CRECES Y CAÑADA DE JORGE.

La Gomera – Islas Canarias.

Miércoles, 6 de octubre de 2021.

Lo que más sorprende al visitante en la isla de La Gomera es la magia del Parque Nacional de Garajonay, un bosque de laurisilva de una gran belleza. Si te interesa conocer algo sobre el Parque, tengo un pequeño resumen al final de la entrada “Circular Meriga LosAceviños” del día 23 de mayo de 2018.

Pues bien…hoy vamos a caminar por el Parque Nacional de Garajonay, haciendo tres de sus 18 rutas, la ruta 5, 12 y 10: dos circulares de cuatro kilómetros cada una, aproximadamente, y una pequeña para enlazarlas. Situadas al borde de la carretera dorsal GM-2, son, por tanto, de fácil acceso, pudiéndose empezar por varios puntos: Las Creces, Raso de la Bruma, Cañada de Jorge o Las Hayas.

No importa que haga calor porque caminaremos a la sombra de los árboles, siendo algunos tramos de los más húmedos del Parque.

Nosotros optamos por empezar en la entrada a Las Creces, ruta 5, donde hay unos aparcamientos y enfrente una parada de guaguas con marquesina.

Entrada a Las Creces.

Mapa de la circular de Las Creces.

Esta ruta es, tal vez, la más visitada por su comodidad, distancia y apta para todas las edades. Aquí, los maestros suelen traer a los escolares más pequeños y los guías del Parque explican todo lo relacionado a la laurisilva, lluvia horizontal, usos del monte… tratándose de un auténtico jardín botánico natural, para el aprendizaje.

Las Creces, conocida también como Jardín de las Creces o antiguamente como Cañada del Jardín, posee una muestra de monte de fayal brezal bastante conservado y ejemplares muy antiguos, como lo demuestra el grosor de las hayas (Morella o Myrica faya), brezos (Erica arborea) y laureles (Laurus novocanariensis), pero estos más jóvenes.

Un dato curioso es que los frutos de las hayas (Myrica faya) se conocen con el nombre de creces y son comestibles. Es probable que el nombre de la zona se refiera a ello y que el de Jardín sea porque en primavera los claros del monte se llenan de geranios de monte (Geranium canariensis) formando un tapiz violeta de gran encanto.

Caminamos por una pista de tierra, unos 700 metros, por la que no se puede circular con bicicleta, hasta llegar a un terraplén convertido en área recreativa, donde hay carteles informativos.

Siguiendo los carteles no hay pérdida, pero puedes optar por hacerlo al revés, es decir seguir por la pista… Nosotros seguimos por el sendero que está a la derecha disfrutando de este maravilloso bosque, observándolo todo como si fuera la primera vez.

Zona recreativa de Las Creces.

En este primer tramo del sendero se encuentra un vestigio etnográfico bien visible, se trata de una canalización muy antigua que servía para recoger el agua procedente de un pequeño naciente y llevarla a las poblaciones próximas, lo que pone de manifiesto uno de los usos del Parque: el aprovechamiento del agua, un bien tan escaso y que el monte, con su lluvia horizontal, se encarga de proveer.

Antigua acequia.

En nuestro recorrido nos encontramos una palmera datilera (Phoenix dactylifera) que no es propia del lugar, por lo que yo recomiendo no tirar ninguna semilla en las zonas de bosque porque, con la humedad, es seguro que proliferan y debemos conservarlo tal como es.

Seguimos hasta llegar a un cruce de caminos, de frente se va a Arure y a la izquierda continuamos nuestra ruta. Ahora ascendemos entre helechos, llegamos a una escalera de troncos y al poco rato estamos en la pista de tierra que dejamos en la zona recreativa.

Cruce de caminos.

Cruzamos la carretera y avanzamos por el sendero que nos indica “Las Hayas” a 700 metros. Y, aunque no esté en la ruta 5 del Parque, hemos decidido ir porque nos parece interesante.

Ahora la vegetación cambia a un fayal brezal de cumbre, donde el árbol que predomina es el brezo (Erica arborea) de un porte más pequeño que los que hemos visto hasta aquí, no obstante, hacen justicia a su nombre “arboreo”.

Fayal brezal, yendo a Las Hayas.

Y ahora sí que, drásticamente, el bosque ha desaparecido encontrándonos en una vaguada en la que está enclavado el barrio de las Hayas.

Dicho barrio pertenece al municipio de Valle Gran Rey al igual que todo nuestro recorrido, excepto Los Risquillos de Corgo que pertenecen a Vallehermoso.

Lo primero que nos encontramos es la ermita de Nuestra Señora de Coromoto cuya festividad es el primer fin de semana de septiembre.

Ermita de Nuestra Señora de Coromoto.

A una altitud de 1000 metros, las casas tradicionales, los cultivos y el palmeral están envueltos por la bruma del monte casi todo el año, por lo que sus 131 habitantes deben adaptarse a este clima.

Casi todas las viviendas están en torno a la carretera Arure Las Hayas, donde se encuentran los dos únicos restaurantes de la zona, y la CV-18 que viene de La Dorsal y termina en Chipude.

Puedes decidir dar una vuelta por el barrio o regresar sobre tus pasos un par de metros. Desde aquí hasta Los Risquillos de Corgo se solapa el Camino Natural Cumbres de La Gomera GR 131.

Nosotros dejamos la GR 131, para no repetir camino, y tomamos la izquierda por un sendero vecinal hasta llegar a la pista que viene del principio de la ruta y continuar por ella, pero lo señalizado es continuar por el sendero que hemos venido hasta la pista de tierra y luego seguir a la derecha.

Sendero vecinal y GR-131.

Pista hacia Las Creces.

Llegamos a la zona recreativa y nos apeteció tomar un tentempié, pero si quieres puedes dejarlo para El Raso de la Bruma.

Continuamos por la pista hasta llegar al punto de salida, en los aparcamientos, ahora debemos cruzar la carretera principal GM-2 e ir a la marquesina ¡Cuidado al hacerlo!

Carretera Dorsal GM-2 y marquesina.

Seguimos hacia la izquierda por un sendero pegadito a la carretera detrás de la valla, hasta la entrada de dos senderos: de frente se va a Vallehermoso por Los Risquillos de Corgo y a izquierda a El Raso de la Bruma.

En realidad, es una pequeña circular, ruta 12, que nosotros terminaremos al regresar.

 

Mapa de Los Risquillos de Corgo.

De momento seguimos de frente por donde dice Vallehermoso 5,8 kilómetros y nos vamos a encontrar un paisaje nuevo, totalmente húmedo donde los musgos abrazan los troncos de los árboles haciendo de ello un verdadero espectáculo. Se trata de Los Risquillos de Corgo.

La dificultad del sendero consiste en que debes llevar calzado adecuado y bastones porque es húmedo y transcurre sobre unos riscos que apenas da vértigo por la vegetación, pero que se ganó el nombre de Risquillos del Valle como era conocido antiguamente.

Y llegamos a la intersección con el sendero que sube a la derecha, que va a El Raso de la Bruma. Aquí dejamos el GR-131, que baja a Vallehermoso.

Si te interesa hacer la ruta a Vallehermoso puedes leer la entrada a mi blog titulada “De LosRisquillos de Corgo a Vallehermoso” del día 15 de abril de 2018.

Empezamos a subir y … ¡OH SORPRESA! … La maravilla es todavía mayor…

Helechos y musgos como barbas de los árboles que cuelgan más de medio metro. Con bruma se ve impresionante y MÁGICO.

Mágico.

Todo esto es debido a que estamos cruzando una zona de crestería orientada en la cara norte, que recibe la brisa casi continua, dejando una gran humedad en este bosque de laurisilva.

Brisa, helechos y musgos.

No tengas prisa pues es corto el camino y muchas fotos que sacar…

Junto a los helechos también hay una planta, que te puedes estar preguntando cuál es su nombre… se trata del alamillo de monte (Pericallis appendiculata), propia de las zonas más húmedas de la laurisilva. Para distinguirla mírale el envés de las hojas, es blanquecino aterciopelado.

Alamillo de monte (Pericallis appendiculata)

Llegamos a la cima y nos encontramos a la izquierda un sendero, que es por donde vamos a regresar, por ahora, lo ignoramos y seguimos adelante hasta llegar a una zona recreativa junto a la carretera principal, este es El Raso de la Bruma.

Raso de la Bruma.

Debemos cruzar la carretera con mucho cuidado hasta el estacionamiento que está enfrente, donde hay carteles indicativos de la circular de La Cañada de Jorge, antiguamente llamada Las Tanquillas de Jorge.

Circular Cañada de Jorge.

La circular, ruta 10, la puedes hacer en los dos sentidos, decidimos ir a la izquierda porque empieza con bajada y luego la subida es suave.

Al principio, como la bruma pasa la carretera desbordándose hacia la vertiente sur, se encuentran árboles de laurisilva, pero después entramos en un fayal brezal como es habitual en esta vertiente del Parque donde la humedad es menor.

La bajada es pronunciada pero no es larga y pronto llegamos al fondo de la cañada con un terraplén donde confluyen dos cañadas. Se trata de la Cañada de Jorge, donde había unas tanquillas que abastecía de agua de riego y de consumo a la población más cercana, Arure. Actualmente hay una tubería de polietileno que sube por la cañada de la derecha.

La vegetación es propia de zonas húmedas pudiéndose plantar aquí dos ejemplares de saúcos (Sambucus nigra ssp. palmensis) para su recuperación, pues estuvo a punto de desaparecer en La Gomera, de hecho, está catalogado como una planta en peligro de extinción. En la actualidad están muy envejecidos, muy altos y con pocas hojas, pasando desapercibidos por aquellas personas que no lo conozcan.

Saúco (Sambucus nigra ssp. palmensis)

Seguimos por la pista de tierra que nos encontramos enfrente y a los pocos metros hay una bifurcación: por la izquierda se va para Arure y por la derecha se llega a la carretera dorsal que es nuestro objetivo.

Caminamos un kilómetro entre un fayal brezal bastante conservado, llegando a alcanzar unos quince metros de altura la mayoría de los ejemplares.

Pista de Cañada de Jorge hacia la Dorsal.

Casi al final de la pista hay un sendero a la derecha con un cartel indicativo, seguimos por él, paralelamente a la carretera dorsal GM-2 el cual presenta una vegetación más propia de fondo de valle que de una altura de unos 1000 metros a la que vamos. Los árboles que nos rodean son laureles, viñátigos, acebiños, hayas y brezos, sus troncos llenos de musgos y líquenes como testimonio de la humedad del lugar, nos sirven de “brújula” indicándonos claramente donde es el norte y el sur.

Yendo al Raso de la Bruma.

Llegamos de nuevo a El Raso de la Bruma, completando aquí la circular, ruta 10. Atravesamos la carretera principal, caminamos unos pocos metros por donde mismo habíamos pasado antes y nos encontramos otro sendero a la derecha, el cual habíamos ignorado cuando pasamos por aquí. Ahora es el que debemos tomar, es un sendero paralelo a la carretera, pero a distinto nivel, que completa la circular de la ruta 12 de Los Risquillos de Corgo. A la mitad del camino hay un mirador con su mismo nombre, que vale la pena ir pues desde él se aprecia una panorámica bastante amplia de Vallehermoso, en el que hay unos ejemplares de tejos (Erica scoparia). 

Mirador de Los Risquillos de Corgo.

Terminamos, de nuevo en la dorsal, vamos a la marquesina y de ahí al estacionamiento de Las Creces.

Y, en el punto de salida, termina nuestra ruta después de haber caminado 10 kilómetros, aproximadamente.

No cabe duda que caminar dentro del monte es un placer añadido.

 

GUAGUAS: La línea 1 y 4 pasan por esta ruta.

CONSEJO: Asegúrate del horario de las guaguas.

No lleves bicicleta a esta ruta.

¡Disfruta!

BIBLIOGRAFÍA:

Carteles informativos de la ruta.

Barrio de Las Hayas:

http://vallegranrey.es/turismo/barrios/

https://www.foro-ciudad.com/tenerife/las-hayas/habitantes.html

https://es.wikipedia.org/wiki/Las_Hayas_(Valle_Gran_Rey)

Saúco (Sambucus nigra ssp. palmensis):

https://www3.gobiernodecanarias.org/medusa/wiki/index.php?title=Sa%C3%BAco_canario

Alamillo de monte (Pericallis appendiculata):

https://www3.gobiernodecanarias.org/medusa/wiki/index.php?title=Palomera